Lo escuchaba atentamente a Joseph Blatter el otro día.

"La organización del fútbol debe profesionalizarse", decía el presidente de la FIFA.

¿Qué significa esto? Quiso decir, sin decirlo, que hay que retribuir de manera correcta a la dirigencia del fútbol.

¿Qué significa esto? No, no significa que los dirigentes hoy no cobren (él nunca quiere hablar de eso).

Sin embargo, el inciso C del artículo 6º del estatuto de la AFA lo prohíbe: "No dar sueldos o retribuciones de ninguna especie a sus dirigentes por el ejercicio de esa función específica, ni convertirse en sociedades comerciales" (dejamos el debate existencial acerca del objetivo de los clubes para otra oportunidad).

El fútbol es (quizás) la herramienta política universal con más participación a nivel mundial. No debe existir organismo que tenga más dirigentes unidos por un mismo estatuto (el de la FIFA) en todo el planeta Tierra.